El proceso ejecutivo laboral forma parte del Derecho Procesal del Trabajo y Seguridad Social, y está diseñado para proteger el crédito laboral y los derechos de los trabajadores. A diferencia del proceso ordinario, esta demanda tiene como fin exigir el cumplimiento de una obligación previamente reconocida a favor del trabajador. Una demanda ejecutiva laboral puede interponerse tras el incumplimiento de lo pactado en un acta de conciliación o en una sentencia judicial ejecutoriada que haya reconocido derechos laborales al trabajador. En este contexto, el juez tiene la facultad de ordenar el cumplimiento forzado de la obligación, incluso mediante embargos o medidas cautelares. Por ejemplo, si un empleador firma un acta de conciliación reconociendo el pago de ciertas acreencias laborales, pero luego no cumple, el trabajador puede iniciar este proceso para hacer efectivo ese derecho. Lo mismo aplica cuando se emite … Leer más